Actor de su vida, y de su película: Rafa Calderón

“En realidad es la paciencia. La paciencia de ser uno mismo”

Llegamos a Ignacio Calderón hace tiempo, era inevitable, dada su profesión, su experiencia y su activismo:

Profesor de Teoría de la Educación en la Universidad de Málaga (España). Interesado en la experiencia de exclusión e inclusión educativa de personas situadas en los márgenes, especialmente desde la discapacidad y la desventaja sociocultural. Empeñado en que la escuela sea un lugar donde todas las personas podamos crear sentido.

Y a través de él pudimos conocer a Rafa, su hermano,  porque, además de tener claro que quiere ser actor de su vida, lo ha sido también de su película.

Aunque lo cierto es que, como dice Ignacio, todo se debe a la resistencia de las familias que, por estar tan cerca de las personas con hándicap, pueden construir, y de hecho construyen, discursos diferentes a las escuelas. Discursos que se basan en la capacidad y no en la incapacidad. Discursos que se basan en el amor, en lugar de en lo técnico. Si somos capaces de hacer que esos discursos sean suficientemente resistentes en las escuelas, estas pueden cambiar.

Ese es el poder de la cultura como herramienta de #NoExclusión, que ayuda a difuminar los límites ficticios para poder estar #EnLaVidaPública. Porque, como se puede ver en el documental, no hubo problemas de inclusión en un entorno artístico.

“Yo soy uno más. Notas a contratiempo”

El documental ya tiene unos años, tal vez volvamos a saber de él a través del arte, bien sea con su música o porque actúe en una nueva película. Ignacio nos irá contando, como hizo recientemente.